¿Quién dice que no hay espectáculo?
¿Quién dice que no hay espectáculo?
Por: Jesús Patiño
Canadá
ganaba 1-0 a falta de un minuto, ante el eterno rival: Estados Unidos. La final
del hockey sobre trineo en PyeongChang 2018 no podía tener más drama. No había
portero en el marco de los estadounidenses, mientras un contragolpe para los de
“La hoja de maple” parecía que liquidaría todo y les daría un nuevo oro
paralímpico después de 12 años.
¡Increíble!
El puck pegó en el poste. El conjunto del equipo de las “Barras y las
estrellas” recuperó la posesión y se lanzó desesperado por un último ataque.
Con 37.8 segundos en el reloj, Declan Farmer logró el disparo que se les había
negado en todo el juego[1].
Gol. Empate agónico. En México se diría que los canadienses la “cruzazulearon”.
Tiempo
extra, pero con el factor anímico para los del “Tío Sam”. Así lo demostró
Farmer, quien marcaría el 2-1 definitivo. "Es increíble", dijo
Farmer. "Especialmente para ir a tiempo extra. Con eso sueñan los niños
"[2].
Un triunfo que representó la tercera presea dorada consecutiva en Juegos
Paralímpicos de Invierno para Estados Unidos en este deporte.
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